El diario de los sueños

Ya que estoy desperdiciando este espacio y que hace mucho que vengo dejando de lado mi diario de los sueños. BUeno... le acabo de encontrar un buen uso a mi blog. Y el que lo lea.... bajo su propio riesgo que yo no decido lo que pasa por mi cabeza cuando duermo ^^

sabado 19 marzo 2005

Que haciamos el grupo mas variopinto ahi sentados en la sala de una casa de pueblo a la mitad de la nada jugando una de esas tonterias de verdad o castigo? no lo se, pero a la mitad de las personas no las conocia.

Me toco a mi castigo y me dijeron, tienes que besar a la persona que esta a tu derecha, voltee a mi izquierda y me di cuenta de que ahi estaba mi marido, con cara de, yo no he dicho nada y bueno al otro lado estaba una tia guapísima que se acercó y se me sento en las piernas.
Vaya beso mas apasionado, cuanod me di cuenta estabamos acostadas sobre el sillon tocandonos todo el cuerpo y respirando trabajosamente, ya no prestabamos atencion al juego y a los que estaban al rededor. Hasta que comenzo a temblar y trueno y relampagos.

Si todo junto. Yo no decido lo que sucede, despues de todo. Levante la vista y vi por la vetana alguien que entraba a escondidas y todos nos asustamos. Por algun motivo pennsamos inmediatamente en fantasmas y algunos salieron de la casa para poner protecciones en el patio. Llovia a cantaros y alguno de los chicos habia abierto la ventana de par en par. Me acerque para cerrarla un poco y de repente me encuentro con un rostro a sentimetros de mi cara! Un susto que me lleve... pero falsa alarma, era uno de mis amigos.

Cuando mire hacia la calle ya no llovia ni era de noche, habia luz e iban llegando mas amigos en una camioneta con instrumentos cargados y mucha fiesta. Ahi arriba venia el Chanok (que hacia en mi sueño el Chanok? eso es uan buena pregunta, no lo veo hace añísimos) y con el lso del Gran Silencio (vaya grupo se me ocurre llevar a mi sueño... si es que hasta pa eso he de tener mal gusto) pero bueno, ahi no parecia desagradable, los salude con mucha alegria y de repente ya no estabamos en un pueblo perdido sino a la orilla del mar, era de noche nuevamente y estabamos todos sobre el escenario haciendo la prueba de sonido ¡eh ese concierto lo recuerdo muy bien! Ahora entendía que hacian estos tíos en mi sueño.

Si despues de eso sucedió algo, que me lo cuenten, yo recuerdo hasta ahi.